Uno de los elementos mas importantes de una edificación importantes son los revestimientos de fachada, pues es la piel que protegerá al resto de los elementos de las condiciones climáticas.
Muchas son las tipologías de revestimientos que podemos utilizar, pero uno de los más utilizados en los edificios residenciales son los Revestimientos con Morteros Monocapa, ya que aportan gran número de interesantes características y además son relativamente económicos, algo que se ha tenido muy en cuenta en los últimos tiempos.
Los Morteros Monocapa aúnan la colocación de un enfoscado exterior con la aplicación de color a dicho enfoscado, por lo que economizan en esta capa las necesidades de Revestimientos Exteriores de Fachadas.
Además, la fachada monocapa aporta cierto grado de impermeabilización, aunque no se puede considerar una capa impermeabilizante en sí misma, pues en caso de lluvias muy continuadas acaba por ceder ante el paso del agua. Es un material que favorece el secado por evaporación entre dos lluvias sucesivas, por lo que entre ellas es necesario un determinado tiempo para que de tiempo al secado.
Es evidente que si los espesores del revestimiento monocapa no son suficientes, este efecto de impermeabilización no se consigue en absoluto, llegando la lluvia a alcanzar el soporte con las consecuencias que veremos a continuación.
Desgraciadamente, como ocurre en otros muchos casos en la construcción es un elemento del que se ha descuidado su ejecución en los últimos tiempos, lo que ha provocado que en la actualidad nos encontremos en muchas ocasiones con desperfectos en los Revestimientos Monocapa que no deberían de haber ocurrido si se hubieran tenido en cuenta una serie de sencillas medidas durante la ejecución del mismo. En las siguientes entradas hablaremos mas extensamente de las mismas.